Increíble. Ya han pasado 10 años. A muchos no os había vuelto a ver desde aquel 28 de junio de 2003. Había ganas de volver a rememorar anécdotas de la facultad, de clase, de la cafetería y por supuesto, del botellón, jeje Qué buenos años vivimos allí. Yo desde entonces me siento mitad malagueña mitad motrileña. No puedo evitar sentirme bien cuando llego a mi Málaga. Cuando el sábado entraba por El Palo bajé las ventanillas para respirar a playa y a ese sabor que tiene la ciudad. Sobre todo para los que no estamos allí. Luego llegué al hostal (anécdotas hay para rato) y volví a charlar cara a cara con una de las personas que conocí en Málaga y que siguen formando parte de mi vida, mi Javi. Un paseo, un shopping, y a reunirnos con todos. Cuando entré al Cheers fue como volver 10 años atrás. Mis niñas, Blanqui y Gloria, y el resto de gente que fueron mis compis un día y que son unos ‘pariodistas’ muy grandes. Abrazos, recuerdos… Fue casi imposible hablar con todos!! Me